Este refugio está situado en un bosque de hayas de Varberg (Suecia), en una colina de la reserva natural de Grimeton. Desde allí arriba se consiguen buenas vistas hacia uno de los lagos. Es el alojamiento para el guarda forestal del lugar, pero sobre todo una moderna arquitectura que cuidó no alterar demasiado la naturaleza.
Toda la fachada del edificio que está mirando al lago se encuentra completamente acristalada, dejando el resto prácticamente opaco. El exterior tiene una textura de madera teñida de negro. La estructura de hormigón del refugio está levantada, no toca la superficie del terreno, con el fin de alterar lo menos posible el sitio. Pero también forma parte del aspecto exterior e interior del edificio, sobre todo en el cuerpo que forma la chimenea de la casa.
El hormigón, la madera, y algunos detalles de zinc, son los materiales principales del proyecto. Vemos ventanas de madera de teca, mientras que la cocina, baño, y entrada, tienen las paredes de hormigón visto. La distribución interior da casi todo el protagonismo a las áreas comunes (salón, comedor y cocina), dejando el espacio justo para los dos dormitorios.
Este moderno refugio fue proyectado por Petra Gipp Arkitektur. Fotos de Björn Lofterud.