Michelle Kaufmann es la arquitecta y promotora de obras sostenibles que supo sobreponerse a la crisis. Desarrolló un interesante trabajo para una vivienda de apenas 140m2, al norte de California. Fue diseñada de tal manera que por dentro parece más grande, gracias a que los espacios fluyen entre sí.
Este bello edificio tiene carpintería de hojas plegables (como un acordeón) en el acceso al jardín. Eso hace que el exterior de la casa quede integrado con el interior. La cubierta de mariposa permite que se puedan tener ventanas altas que ayuden a la ventilación cruzada, y den más luz natural a las habitaciones. La inclinación del tejado es otro punto favorable para los paneles fotovoltaicos, pensados para que la vivienda sea de energía cero. Es decir, que es capaz de producir lo que consuma. En este punto cumplen una misión importante el aislamiento, tanto en cerramientos como en ventanas, las luces LED y CFL, electrodomésticos Energy Star…
El agua que recoja la cubierta de mariposa será almacenada y reutilizada para el riego del jardín, pero también las aguas grises de la vivienda serán recicladas. De esa manera se consigue un ahorro significativo, todo ello teniendo en cuenta que el cuarto de baño dispone de hasta espacio para spa. Este proyecto está previsto construirlo con sistema modular de dos módulos.
Imágenes de la web de Michelle Kaufmann Studio.