Este artículo viene a demostrar que tan solo hace falta una mente creativa, y cierta habilidad manual, para darle utilidad a algo que ya dejó de servirnos. Las fotos siguientes son un ejemplo de algunos de los objetos que se pueden conseguir con el reciclado de latas de aerosoles vacíos.
En uno de ellos se utilizaron como pantalla-soporte para servir de lámparas colgantes. Es el diseño Can Delight, en el que ha sido suprimida la base de la lata para conseguir un tubo donde alojar la bombilla. La parte superior se ha alterado lo suficiente para dejar pasar el cable de alimentación, mientras que el resto del trabajo consistió en aplicar una bella y moderna decoración exterior.
Fueron necesarias 240 latas vacías de pintura en aerosol (de artistas callejeros) para poder fabricar el sillón y el taburete Sparvar. El autor se valió de su experiencia como escritor y pintor, para darle una segunda oportunidad más que digna a un montón de envases vacíos acumulados durante años. Aprovechó la geometría cilíndrica de la lata para utilizarla como módulo en la composición de estos dos originales muebles. Consiguió un producto tremendamente contemporáneo, que además hace uso del color para sorprendernos.
Las lámparas Can Delight que hacen uso del reciclado de latas fueron creadas por el grupo ZEK. El sillón Sparvar corrió a cargo del artista Luigi Semeraro.