La industria de la construcción sigue haciendo las cosas como las ha estado realizando durante años, pero con los robots se puede dar un gran paso hacia el futuro. Este post incluye un vídeo de la estructura impresa en 3D más grande hasta la fecha. La realizó un equipo del MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts), empleando una tecnología que permite construir más rápido y barato.
Detrás de este proyecto está el grupo Mediated Matter, que se ha propuesto llevar la impresión de edificios a otro nivel. En este vídeo se muestra cómo se utilizó una novedosa máquina de impresión, para construir una estructura de planta circular. Su envolvente tiene dos capas, y se va estrechando con la altura.
Un aspecto novedoso de este experimento es que el robot estaba siendo alimentado por paneles solares, aunque también puede funcionar conectado a la red eléctrica.
Esta impresión tiene un diámetro de 15,24m y una altura de 3,66m. Fueron necesarias 13,5 horas para completarla.
Estructura impresa en 3D con tecnología DCP
Esta estructura impresa en 3D es la primera de su tipo. Se fabricó con tecnología Digital Construction Platform (DCP), destinada a la impresión 3D a gran escala. Al disponer de brazo robótico, ofrece mayor flexibilidad de trabajo. Esto se traduce en un área más grande de impresión, permitiendo ampliaciones, y la construcción de formas arquitectónicas que se salen de lo habitual. De hecho sus desarrolladores afirman que dicha tecnología es capaz de imprimir edificios imposibles de construir con métodos tradicionales. También es un método que ofrece una construcción más eficiente, de mayor calidad, y seguridad. Un aspecto interesante es que un DCP puede funcionar de manera autónoma, en lugares remotos, incluso en otros planetas.
Este robot de impresión consiste en un vehículo oruga que tiene un gran brazo robótico, y otro más pequeño en su extremo. Esta combinación permite trabajar con mayor precisión, siendo además altamente personalizable. Es importante mencionar que el brazo no está anclado a una estructura fija. Este detalle hace que se diferencie bastante de los sistemas de impresión 3D convencionales.
El brazo robótico puede utilizarse también con cualquier boquilla de construcción tradicional, ya sea para verter hormigón, o el aerosol de material aislante con el que se hizo la estructura que se ve en el vídeo. El robot DCP puede imprimir con una amplia variedad de materiales.
El profesor Neri Oxman, director de este grupo de investigación, señaló lo siguiente:
No es más que una impresora, pero trabaja de una manera completamente nueva. No solo facilita un cambio de paradigma en la fabricación digital, sino también en la impresión arquitectónica. DCP apunta a una visión futura de la construcción digital que permite nuevas posibilidades en nuestro planeta, y más allá.
Más información sobre esta estructura impresa en 3D, en la web del MIT.