No es la primera vez que nos topamos con una bombilla inteligente. Es algo que está proliferando bastante, sobre todo desde que Philips sacara el modelo HUE. Un fabricante asiático decidió ir más allá creando Sengled Boost. Es una bombilla LED con WiFi, pero con la interesante característica de poder servir también de punto de acceso a la red. La idea es acabar de una vez por todas con la deficitaria calidad de conexión en determinadas habitaciones.
La tecnología Wi-Fi integrada le permite a esta bombilla funcionar como cliente y como punto de acceso a la red inalámbrica del lugar. Sigue el estándar 202.11b/g/n en la banda de 2.4GHz, y a una velocidad máxima de 300Mbps (con 35 metros de alcance).
Como era de suponer, sus capacidades inalámbricas también son aprovechadas para que podamos controlar la bombilla desde cualquier parte. Por eso existe una aplicación (gratuita) tanto para Android como para iOS. Con esta app, el usuario tendrá un centro de mando para todas las bombillas Sengled que tenga instaladas, pudiendo modificar la iluminación a su antojo, y dependiendo de su estado de ánimo.
Este modelo de bombilla led está disponible con el socket E26, E27, y B22. Tiene un consumo de tan solo 6 vatios, y puede llegar a 9 por las prestaciones inalámbricas. Ofrece una temperatura de color de 3000K, y una luminosidad de 470 lúmenes (regulable).
Más información en el sitio de Sengled. Es una compañía de Shanghai que también opera en Europa y América del Norte. Se dedica a crear productos para la iluminación que ayuden al usuario a ahorrar energía, como es el caso de esta bombilla led con wifi.