Detrás de MOSS (Micro Office Space Systems) está la idea de aprovechar las ventajas del trabajo telemático. Las empresas pueden poner a disposición de sus empleados unas casetas prefabricadas para tal fin. Bastará con utilizarlas como oficinas, en el patio trasero o jardín de sus viviendas. Esto no es nuevo, pues hay infinidad de conceptos y prototipos creados con este propósito. Por nuestro blog ya han pasado muchas oficinas prefabricadas modernas que son ideales para este estilo de trabajo en auge.
Las compañías pueden comprar o alquilar estas oficinas, y enviarlas a los hogares de sus trabajadores. Se pueden instalar en cualquier parte, incluso en una azotea, evitando así desplazamientos diarios a las instalaciones de la empresa. Las casetas de jardín MOSS son espacios compactos con todo lo necesario para trabajar cómodamente. Están debidamente aisladas, y provistas de conexión a la oficina principal.
La unidad base tiene cuatro metros de largo. Es fácil de transportar e instalar en el sitio, sobre una sencilla cimentación de hormigón. Tiene una sección octogonal, un acabado exterior de aluminio, y el interior de madera contrachapada de abedul. Su estructura está hecha de perfiles metálicos y paneles de madera laminada (SIP). No posee de instalación de fontanería, ni aseo, pero con un poco más de longitud (ver planos) es posible disponer de una oficina MOSS con inodoro y una pequeña cocina.
La calefacción de estas casetas de jardín se realiza por una instalación por suelo radiante. También hay una estufa de leña, que se puede utilizar durante los días de más frío. En el aspecto energético, estos búnkers para trabajar pueden funcionar mediante paneles solares situados en cubierta, y un pequeño molino de viento.
Estas casetas prefabricadas fueron diseñadas por Victor Vetterlein.
