Ya sabíamos que el ritmo del deshielo en el Polo Norte se había acelerado en los últimos años, sobre todo desde el 2007. Esto aparte de provocar cambios drásticos en las cartografías, también provoca alteraciones en el clima. Pero los científicos además miran con lupa lo que está sucediendo en la Antártida. Resulta que una investigación llegó a la conclusión que el continente antártico podría derretirse si se quemaran todos los combustibles fósiles del planeta. Sería la primera vez en quince millones de años que ocurriría esa descongelación.
Desde años atrás se ha venido debatiendo este fenómeno. Es decir, si debido al cambio climático provocado por la acción del hombre, la Antártida se podría derretir. Ken Caldeira, uno de los autores del informe, llevaba 35 años con esa intriga. Pero no había encontrado ni el equipo ni las herramientas apropiadas para comprobarlo. Comenta que «ha sido un verdadero placer finalmente llegar a abordar esa cuestión«. Y es que se pudo crear un modelo avanzado de capa de hielo, y probar el impacto que podrían tener sobre el continente helado diferentes niveles de emisiones de gases de efecto invernadero.
Las emisiones que provocaría la quema de la totalidad de combustibles fósiles, sentaría las bases para el calentamiento. A ello seguiría un posterior aumento del nivel del mar durante los próximos siglos. En los primeros mil años desde la quema de dichos combustibles, los niveles globales de los mares subirían una media de 30 metros, y otros treinta metros más en los siguientes nueve mil años.
Sobre Ricarda Winkelmann
Ricarda Winkelmann (autora del estudio) señala que «este tipo de aumento del nivel del mar sería sin precedentes en la historia de la civilización«. Además explica que es aún más peligrosa la presencia de agua caliente que el aire, pues mantiene su temperatura más constante. Sería capaz de derretir las capas de hielo de la Antártida desde abajo hacia arriba. Aunque 60 metros de subida del nivel de los océanos pueda sonar demasiado apocalíptico, lo cierto es que se trata de un resultado situado en un futuro muy lejano.