Los jardines verticales están teniendo un auge especial en Colombia. Allí se realizaron instalaciones que visten de un manto vegetal las envolventes de algunos edificios públicos, particulares, y comerciales. Un ejemplo lo vimos en su día con la fachada del Hotel B3 Virrey en Bogotá. Las fotos de este artículo son de una imponente pared vegetal en una torre residencial de Medellín, en la comuna El Poblado.
El citado jardín cubre con cientos de plantas autóctonas parte de una fachada de una torre de apartamentos, alcanzando una altura de 92 metros. Eso lo convierte en el segundo jardín vertical más alto del mundo, justo por detrás del que se instaló en la Casa Antilia (Mumbai).
Además de ser especies nativas de la región, las plantas se seleccionaron para que pudieran soportar los fuertes vientos dominantes, empleando un sistema hidropónico adaptado para la ocasión.
Este singular jardín fue diseñado e instalado por la empresa Groncol, que ha utilizado tecnología hidropónica de la firma Paisajismo Urbano.