Es relativamente fácil dejarnos impresionar por las nuevas viviendas sostenibles y autosuficientes. Pero cuando se piensa en la integración de las energías renovables en la arquitectura, también hay que enfocarse en los edificios existentes. ¿Por qué? sencillamente porque son la mayoría. Precisamente este artículo tiene que ver con una solución BIPVT (Building Integrated Photovoltaic Thermal). Fue creada por investigadores de la universidad australiana de Wollongong. Trabajaron en colaboración con la empresa BlueScope Steel, y el Instituto alemán Fraunhofer. De esa manera crearon una solución fotovoltaica y térmica para edificios ya construidos.
Esta brillante solución se añade a la vieja cubierta del edificio. Como ya se habrá adivinado, incorpora células fotovoltaicas. Pero esta nueva piel BIPVT deja que el aire fluya entre ambas cubiertas, por un conducto cerrado. La función de ese flujo de aire es doble, por un lado sirve para enfriar a las placas solares (hacerlas más eficientes); y por otro permite que ese aire caliente se pueda utilizar para calentar o enfriar el interior del edificio.
El objetivo final es la de encontrar una solución que pueda instalarse en una amplia variedad de edificios y climas. También se estudió la incorporación de materiales de cambio de fase (Phase Change Materials) para hacer aún más eficiente este sistema BIPVT.
Más datos en la Universidad de Wollongong.