Teniendo espacio en el jardín, es posible utilizarlo para colocar alguna de las muchas casetas prefabricadas que existen en el mercado. Así se puede tener un sitio donde guardar herramientas y utensilios de jardinería; o utilizarlo como una habitación más (trabajar, relajarse,…). El modelo Aston es un cobertizo de madera con un estilo parecido a los que fabricaba Cabin Fever. Tiene unas dimensiones de 3,05 x 2,29 metros, y una ventana longitudinal justo encima de su entrada.
Toda su estructura se entrega ya cortada y embalada. Pesa casi 500 kilos, en incluye el piso, puertas, herrajes, incluso las rejillas de ventilación. Estas casetas prefabricadas pueden ensamblarse en un par de días (por dos personas); la madera viene ya tratada, pero no está pintada ni incluye el acabado de cubierta. Esto es así para que el propietario pueda darle la terminación adecuada, según su vivienda y gustos personales.
En este sitio está la lista completa de características.