No será el mejor diseño del año, ni tampoco servirá para estar allí por mucho tiempo. Lo que se ve en las fotos es un refugio de madera con cama, dos sillas, y estufa de leña. El interés de esta pequeña cabaña está en que se construyó únicamente empleando materiales recuperados.
Está ubicada en una finca de 16,2 hectáreas de California. Victor Summers* se inspiró en los templos sintoístas japoneses cuando la diseñó. Pero la construyó con piezas que encontró de restos de demoliciones, y de material de desecho. Está montada sobre cuatro gruesos apoyos de madera, y se accede a ella mediante una escalerilla; la fachada de entrada está completamente acristalada, y en el resto la luz entra a través de unas preciosas celosías. Como dato curioso, añadir que se trata de una cabaña que está en venta.
(*) Victor Summers es un constructor de estructuras de jardín personalizadas, hechas con materiales reciclados. También es el propietario del sitio Simple Shelter Texas.