Una pareja de Salt Lake City (Utah, EE.UU.) se enfrentó al reto de construir una casa de vacaciones en un lugar bastante alejado. Había poca o ninguna confianza en los constructores de la zona, y nula posibilidad de controlar los trabajos y proceso de construcción. Al final se decidieron por la solución más lógica: una de las viviendas prefabricadas de Stillwater. El modelo elegido fue el sd111, una casa que en sus 81m2 permite desarrollar un hogar acogedor.
Este modelo prefabricado es de un solo dormitorio, pero muy amplio. Está bien equipado de armarios, posee cuarto de baño con ducha, espacio para la lavadora, y un módulo más grande que incluye salón con cocina-comedor. Fue elegido por los clientes porque consideraron que su precio era razonable. También porque su sencillo y moderno diseño se ajustaba a lo que buscaban.
Tan solo fueron necesarios 10 días para trasladar y ensamblar esta casa prefabricada en el sitio.
La vivienda está hecha siguiendo el método de construcción sostenible de Stillwater. Está construida con materiales de baja huella de carbono, reciclables, y pinturas de bajo COV. La iluminación es eficiente, mediante lámparas fluorescentes y LED; además posee un gran aislamiento y sellado. La casa incluye sanitarios de bajo consumo de agua, y electrodomésticos de energy star. Todos los detalles se pueden leer en el artículo de las casas Stillwater que escribimos en su día. Tampoco hay que olvidar que esta sd111 está diseñada para tener un comportamiento pasivo, y que los propietarios pudieron personalizarla a su gusto en los acabados. Para esto último fueron suficientes algunas llamadas semanales por Skype con el fabricante.
Fotos de Stillwater.