Detrás de Homefarm hay una brillante idea que combina las residencias para personas mayores ya jubiladas, las granjas urbanas, y la generación de energía. Este concepto está originalmente planteado para Singapur, pues esta ciudad-estado tiene una población que envejece rápidamente. Pero también tiene una gran dependencia del exterior para alimentarse.
El proyecto consiste en bloques lineales de apartamentos, de un trazado sinuoso. En los niveles inferiores (y en fachada) tienen superficies para el cultivo de hortalizas. Esto facilita que personas de avanzada edad puedan entretenerse con las labores propias de una granja. Ese trabajo puede estar remunerado, al tiempo que las personas están atendidas.
Estas instalaciones adoptan un sistema de acuaponía que ya se ha estado utilizando con éxito antes. Consiste en combinar la acuicultura (cría de peces) con la hidroponía (cultivo de plantas sin usar el suelo) de manera simbiótica. De esta manera los desechos biológicos de los peces son utilizados como nutrientes para las plantas. Pero a cambio las plantas se encargan de limpiarles el agua. En Homefarm la instalación es mucho más compleja, y sostenible, porque ese agua es lluvia almacenada. Ya para hacerlo aún más sostenible, la energía que consumen las viviendas proviene de quemar biomasa procedente de los residuos agrícolas.
Al tener los sótanos ocupados por los garajes, esta idea hace un uso intensivo de las azoteas como huertos tradicionales. También existen cultivos en fachada que están plantados en tierra, como se indica en el siguiente gráfico.
Mantener a personas mayores ocupadas en algo tan saludable como son las labores agrícolas, a la vez que se producen alimentos y energía. Es sin duda una idea genial que no solo puede ser válida para Singapur, sino también para cualquier otra gran ciudad.
Esta idea para granjas urbanas fue elaborada por el estudio de arquitectura SPARK.
