Kisielice es una pequeña localidad polaca de poco más de dos mil habitantes, y un ejemplo en energías renovables. Fue galardonada por la Unión Europea con el premio ManagEnergy por haber logrado la autosuficiencia energética con energías renovables. Utilizó la financiación de sus parques eólicos, en la inversión de sistemas de generación de energía y calefacción. Además logró unos ingresos extras para los agricultores, por suministrar residuos agrícolas a una planta de biogás, y por los aerogeneradores de sus tierras.
La mayor parte del territorio de Kisielice son tierras de cultivo. Cuenta con 48 aerogeneradores (82MW) que al parecer fueron construidos por Iberdrola. Están repartidos en dos parques eólicos, con un tercero en construcción (24MW, por Fersa). Gracias a los ingresos fiscales y a determinadas subvenciones, el municipio ha construido una instalación de calefacción que abastece al 85% de sus edificios. Está alimentada por una caldera de biomasa (6MW), y en verano esta planta produce agua caliente sanitaria.
Por si esto fuera poco, en diciembre del 2013 la ciudad construyó su primera planta de biogás. Y próximamente comenzará la licitación de la que será la primera granja solar de la región. Cada edificio público dispondrá de una instalación fotovoltaica de 10kW de capacidad. Y ya se está modernizando el alumbrado en las calles con el fin de reducir el consumo, todo ello para alcanzar el objetivo de ser una comunidad autosuficiente energéticamente.
Hay que tener en cuenta que este logro tiene un gran mérito, ya que Polonia es un país que depende energéticamente en un 90% del carbón.