Teniendo una impresora 3D es posible fabricarse un montón de cosas, como este aerogenerador doméstico portátil. Se podrá colocar en la azotea, un balcón, o incluso llevártelo si quieres de camping, porque cabe en una mochila. Se trata de AirEnergy3D, un proyecto que arranca de una idea que nos parece estupenda: que una impresora 3D pueda llegar a imprimir algo que tenga más valor que la propia impresora. La turbina (de eje vertical) tiene capacidad para generar hasta 300W de potencia. Y puede utilizar esa energía sobre la marcha, o almacenarla en una batería.
Para hacer todo esto realidad, sus diseñadores alcanzaron con éxito una campaña de financiación en Kickstarter. Se entregaba un kit básico con el modelo 3D y un circuito electrónico, controlado mediante una aplicación móvil. Pero este proyecto es también de código abierto (open source). Porque su desarrollo implica la publicación de todos los datos técnicos de forma gratuita. Con todos los componentes catalogados, así como las instrucciones para su montaje. Cualquier persona con mínimos conocimientos es capaz de adaptar este producto a sus necesidades.
Este proyecto viene de la empresa Omni3D, dedicada a la fabricación de impresoras 3D.