La North Peak House está ubicada en los límites de una zona residencial. Tiene un bosque al sur, y un campo abierto al norte. Sus propietarios dan clases en la Universidad de Texas, uno de ellos especializado en salud ambiental, por lo que es fácil entender que el proyecto rápidamente se convirtiera en todo un laboratorio para su investigación. Esta vivienda tiene características que están muy por encima de las que habitualmente encontramos en una construcción verde. Por eso recibió una calificación de cinco estrellas por la Austin Energy Green Building (207 puntos de los 165 necesarios).
Cada material y procedimiento fue cuidadosamente revisado por el efecto que podía tener en la calidad del aire interior de la casa, e impacto medioambiental. Se consideraron estrictas normativas, y una larga lista de sustancias nocivas, con el fin de asegurar que estaban libres de toxinas.
Se incluyeron también materiales reciclados y recuperados (muchos de ellos locales). El diseño favorece un comportamiento solar pasivo del edificio: ganancias de calor en invierno, y protección en verano; buena ventilación natural cruzada; vegetación autóctona en los jardines. Energéticamente hablando, la North Peak House tiene un comportamiento bastante eficiente, estando alimentada por unos paneles fotovoltaicos situados en el tejado, y una interesante instalación de bombas de calor geotérmicas.
En la siguiente sección están señaladas algunas de las características sostenibles y saludables que definen este proyecto.
El proyecto de esta vivienda ecológica ha sido realizado por Furman + Keil Architects.