Científicos de la Universidad de Harvard desarrollaron una batería de flujo que apenas pierde capacidad de carga, y que se fabrica con materiales más baratos. Esta nueva batería recargable líquida tiene dos soluciones acuosas, en pH neutro. Utiliza electrolitos de ferroceno y viológeno. Pierde el 1% de su capacidad a los 1.000 ciclos, y no es tóxica, por lo que podría tener también aplicaciones domésticas.
Resumen del informe de Red Eléctrica, sobre generación eléctrica en España durante el 2015, especialmente enfocado en la producción de energías renovables. La demanda aumentó después de cuatro años seguidos de descenso, pero disminuyó la producción de energía limpia, provocando una subida por fuentes contaminantes (carbón), y por tanto de las emisiones de CO2.