Alemania es uno de los países que más en serio se está tomando la reducción de emisiones de CO2. También está consiguiendo hitos históricos, como el alcanzado el pasado 25 de julio, cuando el 78% de la energía consumida provenía de fuentes renovables. Ahora un informe del Centro de Energía Solar e Investigación de Hidrógeno Baden-Württemberg (ZSW) y otras asociaciones, señala que las previsiones para el final del 2015 son que un tercio de la energía del país vendrá de la solar, eólica, y otras fuentes limpias.
Todo parece indicar que antes de fin de año Alemania habrá producido 193 mil millones de kilovatios hora de electricidad a partir de fuentes renovables. Eso supone una quinta parte más que en el 2014. El pasado 31 de octubre, la eólica ya había suministrado un 47% más de electricidad que durante el mismo periodo en el año anterior. Pero la energía solar tampoco se queda atrás, pues para esa fecha ya había producido la misma energía que durante todo el 2014.
La importancia de las energías renovables
Hildegard Müller, presidente del consejo de administración del BDEW (Asociación Alemana de Energía e Industrias del Agua) ha llegado a decir que:
Independientemente de la relación exacta a la que se llegue al final de año, se ha puesto de manifiesto una vez más que las energías renovables siguen ganan importancia en el mix eléctrico alemán. Al mismo tiempo, la necesidad de tomar medidas para integrar las energías renovables en el sistema global de generación de energía crece.
Fritjof Staiß, director del Centro del ZSW también ha señalado que:
Si las energías renovables alcanzan ahora 1/3 de la demanda de electricidad, está claro que este elemento de la Energiewende (transición energética de Alemania) está en un camino prometedor. La creciente participación de fuentes renovables hace a Alemania menos dependiente de los combustibles fósiles, contribuyendo así a lograr sus objetivos para la protección del clima.
Incluso si por cualquier motivo no se llegara a alcanzar ese 33% ahora, es evidente que el camino recorrido por este país es un ejemplo para el resto del mundo.
Fotos de Dirk Ingo Franke. y Jimmy Baikovicius.