Esta caseta casi minimalista se construyó para sustituir un viejo cobertizo que había junto a una granja de un pueblecito holandés (Hei- en Boeico). Se destinaría a guardar maquinaria agrícola, herramientas, y alimento para ovejas y gallinas. El encargo para los arquitectos consistió en diseñar un nuevo cobertizo con 12 paneles fotovoltaicos situados en su tejado. La intención era abastecer de energía limpia a toda la granja.
Tiny Solar Shed responde perfectamente a lo que el cliente deseaba. Se utilizó un revestimiento exterior de chapa corrugada (habitual en un granero). Como la dirección sur estaba exactamente en la diagonal de la cubierta, se cambió su orientación para optimar la captura solar. Esta disposición también se utilizó para la textura corrugada de los paneles en las fachadas laterales del nuevo cobertizo. Todo el esqueleto estructural es de madera, y está pintado de color naranja.
Este proyecto fue realizado por Ruud Visser Architects, en colaboración con la gente de Fumi Hoshino.