Scott Brusaw y su esposa Julie llevan trabajando desde el 2006 en un apasionante proyecto de paneles fotovoltaicos hexagonales, con los que pavimentaron el garaje de su casa. La idea era poder generar energía durante las horas que no tuvieran el coche aparcado. Pero su visión es bastante más ambiciosa: con estas placas se pretende conseguir Carreteras Solares.
Estas losetas fotovoltaicas se fabrican con el mayor contenido posible de materiales sostenibles, estando su capa superior hecha con vidrio reciclado. Por supuesto es resistente al paso de vehículos pesados (verificado por diferentes laboratorios). La intención última es que estos caminos se puedan pagar por si mismos con la electricidad que puedan abastecer a hogares, empresas, vehículos eléctricos, etc. El garaje de los Brusaw salió bastante caro (a razón de 10 mil dólares por cada 7 hexágonos), pero un proyecto de este tipo a gran escala abarataría bastante los costes, y generaría muchos puestos de trabajo. Todo eso es teoría, pero la realidad ha resultado ser mucho más dura.
Estas futuras carreteras incluirán un corredor de cableado fácilmente accesible para el mantenimiento, por el que podrán discurrir diferentes servicios (electricidad, telefonía, internet…). Estarán preparadas para una correcta escorrentía del agua de lluvia, así como su tratamiento, almacenamiento y distribución. Gracias al sistema de calefacción integrado, estas vías estarían libres de hielo y nieve, sin baches, y perfectamente señalizadas con LEDs. Además, en caso de un peligro (un animal en la carretera, o un accidente), la calzada inteligente puede detectarlo y actuar en consecuencia advirtiendo a los vehículos con su señalización.
El proyecto surgió en Indiegogo
La pareja tuvo mucho éxito con una campaña de financiación en Indiegogo. Con ese dinero realizaron ajustes al prototipo y agilizaron el proceso de fabricación, antes de poder ofrecerlo a sus potenciales clientes, y al público en general. Porque lo que siempre pretendieron fue instalarlo en acerados, estacionamientos, calzadas, patios, etc. Aunque el objetivo último sea trasladarlo a carreteras y autopistas. El proyecto de Carreteras Solares llegó a recibir ayuda de la Administración Federal de Carreteras de los Estados Unidos, y por lo visto fue todo un fracaso.
Hay más información en el sitio oficial de Solar Roadways.