Krøyers Plads es un desarrollo residencial sostenible resuelto con mucha habilidad en una zona histórica de Copenhague. Precisamente por ser tan respetuoso con el medio ambiente es por lo que recibió una etiqueta ecológica Nordic Swan.
Este complejo residencial se ubica en una de las áreas más codiciadas del puerto de Copenhague. Está casi enfrente del teatro Royal Playhouse de la ciudad, y próximo al histórico paseo marítimo de Nyhavn. Consiste en la construcción de tres bloques residenciales de cinco plantas, con un total de 105 apartamentos. Las dimensiones de dichas viviendas son muy variables, oscilan entre los 79 y 250m2. Algunos espacios de la planta baja se han destinado a local comercial (tiendas, restaurante, y supermercado).
En vez de implantar una nueva tipología, Krøyers Plads es una reinvención de las viejas naves industriales que ya existen en la zona.
Las nuevas viviendas se construyen como una continuación de los almacenes existentes, todos situados perpendicularmente al borde del agua. Los tres bloques dejan un espacio generoso en la línea de costa. De esa manera se crea un ancho paseo, y una plaza en la esquina del sitio.
Un aspecto importante de este desarrollo son las cubiertas de los nuevos edificios. Son quebradas, y sus vértices se corresponden con las alturas de cornisas y cumbreras de los edificios vecinos. A nivel de calle, se han creado funciones públicas que invitan al barrio a dinamizar la vida urbana.
Desarrollo residencial sostenible con eco-etiqueta nórdica
El proyecto cumple con los exigentes requisitos de sostenibilidad del Nordic Ecolabel, que es el oficial en los países escandinavos. Dicho certificado verde se estableció en 1989, con el propósito de contribuir con el consumo y producción sostenible.
Desde finales del 2015, la Nordic Ecolabel viene exigiendo que se supere al menos en un 25% la eficiencia energética establecida por los código de construcción. Pero estos bloques de pisos están hechos con unos materiales, y un nivel de aislamiento tal, que son un 40% más eficientes. Hay que señalar que Krøyers Plads fue el primer desarrollo de viviendas de Dinamarca en conseguir este certificado ecológico. También recibió el premio Green Good Design 2017.
El proyecto de este desarrollo residencial sostenible lo realizó el estudio Vilhelm Lauritzen Architects y COBE.
Muy interesante el post. La verdad que en los países nórdicos nos llevan años de ventaja en el ámbito de la construcción sostenible y la eficiencia energética. Esperemos que poco a poco esos conocimientos y conciencia por el medio ambiente se expanda y llegue a la construcción en España.
Un saludo y enhorabuena, de nuevo, por el post.