Serge Schoemaker diseñó este cobertizo para jardín que funciona como un lugar de trabajo, almacén de bicicletas, y habitación de invitados. Es una construcción de 30m2 que está revestida exteriormente (y en cubierta) por tejas de madera de cedro, lijadas y barnizadas a mano. Por dentro, el acabado es de tableros contrachapados de abedul. Tiene forma irregular, con gran ventana en esquina, y otra justo en el escritorio.